Por Héctor Tecúm, Corresponsal
Quiché, 10 Abr (Cerigua).- El proceso que se sigue contra el ex agente de
Méndez manifestó tener confianza en que se hará justicia, pues hay suficientes pruebas para que se condene al ex agente, a quien identificó plenamente en la última audiencia, como uno de sus agresores, mientras que el otro sindicado, Neri Osberto Aldana, se encuentra prófugo de la justicia.
La ofendida, de 44 años de edad, es originaria de la aldea Macalajau, Uspantán, Quiché; es analfabeta, monolingüe Kiche’, con 11 hijos y de condición económica muy pobre; fue trasladada el 17 de enero de
Méndez recordó que por no existir una cárcel para mujeres en el lugar, fue dejada en el pasillo de una de las celdas, únicamente con un colchón para dormir; en horas de la noche el agente que tenía a cargo su custodia la violó en reiteradas ocasiones, junto a otro elemento policial; posteriormente fue obligada a bañarse completamente desnuda, mientras que policías y reclusos se burlaban de ella.
Lucía Morán, del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales de Guatemala (IECCPG), entidad que actuó como querellante, dijo que esperan una sentencia condenatoria de 27 años de prisión inconmutables y que el testimonio del también ex agente, Lázaro Bubón Cano, fue fundamental en el proceso, por ser testigo presencial del hecho.
Fin Cerigua
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