Guatemala, 15 May (Cerigua).- Simplemente están cumpliendo con las leyes del país, dijo el Embajador de Estados Unidos en Guatemala, James Derham, al justificar a las autoridades migratorias de esa nación que continúan con la cacería de migrantes.
Mientras, la mayoría de los 287 guatemaltecos, capturados en Iowa el pasado martes, continúan a la espera de lo que decidan los tribunales de ese estado, aunque se prevé que serán deportados en los próximos días.
De acuerdo con publicaciones de prensa, 30 de los connacionales detenidos recobraron su libertad por razones humanitarias, luego de la intervención del consulado guatemalteco en Chicago, que tiene la circunscripción del estado de Iowa.
En medio de la incertidumbre que viven los aprehendidos y sus familias en Estados Unidos y Guatemala, se han alzado voces de rechazo y repudio por la forma en que son tratadas estas personas al momento de su captura y su posterior deportación.
La información publicada por el diario estadounidense The Washington Post desnuda una realidad siempre denunciada por los migrantes, que consiste en un sinnúmero de vejámenes que cometen las autoridades migratorias de Estados Unidos contra la población latina.
De acuerdo con el diario, los detenidos son inyectados a la fuerza con diversos tipos de droga, para evitar una posible resistencia o violencia durante el proceso de deportación a sus respectivos países.
Por ejemplo, los migrantes detenidos el pasado martes en Iowa fueron ubicados en una cárcel improvisada, en una arena de exhibición de ganado, donde permanecen a la espera de lo que se resuelva a su favor o en su contra.
Entre estas personas hay menores de edad, mujeres en período de gestación, madres solteras y enfermas, quienes tras su detención e inminente expulsión vivirán la historia de miles de guatemaltecos más que han sido separados de sus seres queridos, muchos de ellos han quedado desamparados en el norte, especialmente niños y niñas.
Fin Cerigua
Jp-Ld
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