Guatemala, 27 Mar (Cerigua).- La solución de fondo ante los recientes conflictos agrarios en Livingston Izabal, es lograr la legitimidad del Estado de Derecho, señaló Adrián Zapata, en su columna Alternativa, publicada en Siglo Veintiuno.
Zapata subrayó que las luchas sociales de grupos urbanos y rurales están sobrepasando las líneas de la actividad delictiva, cuando estos intentan aplicar la justicia y seguridad que no brinda el estado o exigen el cumplimiento de sus demandas mediante acciones ilegales.
La toma de rehenes por parte de campesinos en Izabal ha sido una oportunidad, para quienes promueven soluciones de fuerza y criminalizan al movimiento social; la opinión pública, construida principalmente por la clase media urbana, formada en una línea conservadora, apoya una actitud similar, lo que conllevará fácilmente a reprimir las luchas sociales y conducir al autoritarismo, señaló el columnista.
Según Zapata la única ruta estratégica es la existencia de un Estado de Derecho, cuya característica esencial es su capacidad para garantizar el ejercicio de los derechos civiles, políticos y sociales de la población en general, cuya mayoría actualmente está excluida.
La desesperación derivada de la pobreza y la exclusión debe ser enfrentada a través de soluciones políticas y cambios estructurales; la represión hacia los movimientos sociales únicamente conduciría a una espiral de conflictividad y violencia, finalizó.
Fin Cerigua
Rp-Ld
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